El padre Eduardo Pérez Iribarne se fue de esta vida ayer, a los 80 años. Entrevistó a miles de personas, decía él mismo. Y se declaró militante del culto antipersonalidad, por eso se llamaba así: el hombre invisible, porque consideraba que el ego convierte en monstruos a quienes le rinden pleitesía. Se definía como un obrero y lo demostraba en cada puesta al aire de........