Cómo frenar a los avasalladores urbanos
En los últimos años, el municipio cruceño se ha convertido en un blanco apetecido por avasalladores y traficantes de tierras, quienes se aprovechan de las debilidades del sistema para cometer sus delitos. De poco sirven las leyes, la planificación urbana o las áreas verdes, si al final mafias organizadas presentan supuestos títulos de propiedad y animan a incautas familias a asentarse en terrenos, abrir vías y destruir el medioambiente.
La realidad de esta situación se evidenció recientemente cuando una comisión compuesta por concejales, policías y gendarmes llegó a los predios municipales colindantes con el Jardín Botánico de Santa Cruz. Los avasalladores habían desmontado el área para abrir caminos y parcelar terrenos en lotes.
Las personas ya asentadas afirman que pagan en cuotas sus lotes al supuesto dueño que los comercializa. Lo grave es que los documentos........
© El Deber
visit website