Mucho se discute si el primer funcionario público del país es un presidente débil y, en extremis, negligente para ejercer el cargo, o es un ganador por no haber perdido ninguna batalla política frente a sus contrincantes: metió preso al gobernador electo del principal departamento de Bolivia; tiene a Evo Morales contra las cuerdas por estupro y trata y tráfico de personas; está sorteando una de las crisis económicas más profundas de toda la historia de Bolivia (carencia de divisas, de carburantes, de un desabastecimiento permanente por culpa de una brutal organización criminal de contrabandistas); debajo de sus narices se quemaron más de 11 millones de hectáreas, pero a él no le pasó nada.
Le hacen paros, bloqueos de semanas organizados por........