La libertad de no estar tieso

Turistas en un velador del centro de Sevilla / EP

En mitad de algunas terrazas hay calles que molestan. Hay plazas que estorban a los veladores. Incluso algún columpio o malvado tobogán que, ¡oh, no!, puede usarse gratis y que hace menos rentable el espacio ¿público? Cuentan que aún queda algún niño anticuado que se atreve a jugar al balón en plena calle, molestando a los vecinos y los negocios como se hacía antes. Leyendas urbanas. Literalmente.

¡Nos fríen a impuestos! ¡La tasa turística sería el fin del turismo! Y caminar por la calle sin rumbo es de pobres. ¿Un banco en una plaza pública? No. Mejor una buena terraza. Que uno pueda tomarse una caña y brindar por la libertad de no estar tieso.........

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