Gente que comunica

Óscar Puente. / EFE - Fernando Villar

Un ministro. Si a Óscar Puente le hubieran dicho hace un mes que llegaría un día en el que todo el mundo le alabaría, seguramente hubiera respondido con algún tuit desabrido y faltón. Pero ese día ha llegado: el ministro al que más le va la marcha no ha parado de entrevistas en la radio y en la televisión; por la mañana por la tarde y por la noche; y hablando de autovías, de trenes y de ramales. Y lo está haciendo con una solvencia excelente. Pareciera que Puente se cayó de pequeñito en la marmita donde se cocinaba el saber de las grandes infraestructuras, pero no lo ha tenido fácil: primero tuvo que sustituir a Ábalos en un ministerio infestado de bombas lapa y donde tuvo que extraer el veneno original, para acto y seguido hacer frente al problemón de las obras de Chamartín. Y para no aburrirse, la DANA. En todas estas........

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