La proclamación de Isabel I como reina de Castilla, el 13 de diciembre de 1474, en la Plaza Mayor de Segovia, fue un acontecimiento de primera magnitud. Un hecho histórico que estableció un vínculo perenne entre la ciudad del Acueducto e Isabel la Católica. Ambas realidades históricas, la ciudad milenaria y la Reina junto con su esposo, Fernando de Aragón, ocupan un lugar preferente, que trasciende el ámbito geográfico más próximo y abarca hasta el continente americano. Los datos rigurosos disponibles nos cuentan las dificultades que supusieron la ascensión al trono de Isabel y las que siguieron hasta 1479, cuando finalizó la guerra con Portugal. Las grandes dotes políticas, junto con la tenacidad de ambos monarcas explican el extraordinario logro que consistió en cimentar las bases del Estado moderno. En palabras de uno de los más señalados especialistas Tarsicio Azcona, refiriéndose a Isabel reconoce que construyó el estado castellano logrando “una poderosa y........