Usando calzoncillo prestado

Cuando la ambición y la terquedad se juntan ,el resultado puede ser sorpresivamente bondadoso o inevitablemente desastroso.

A ese punto hemos llegado en la congestionada vivencia de los colombianos que aspiran a ser presidentes.

Basta con considerar un par de casos muy significativos en detalle y dejar otros en salmuera. Quintero y Abelardito son ese ejemplo contundente.

El otrora alcalde de Medellín, con una habilidad para buscar la hendija por donde meterse cual ratoncillo........

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