Oh gloria inmarcesible

No sé cuántas verdades de puño o ilusiones imposibles podrán terminar de aprobarse hoy en la COP de Cali. Nadie ha percibido la lucha intramuros entre los defensores de la biodiversidad, abanderados por la izquierda universal y las pataléticas acciones bajo la mesa de los defensores oligarcas de los transgénicos. Poco o nada importa para medir el mayúsculo resultado que Cali, con su alcalde Eder a la cabeza, ha obtenido.

Como por arte de magia, Cali pudo asimilar el........

© Diario Occidente