Mamá María

Mi madre me decía que yo tenía oído de artillero. Ella, que tocaba el violín diariamente y que ayudó a sostener el engranaje familiar tocando desde muy niña su instrumento en las misas de San Bartolomé, debía saber muy bien quienes estábamos impedidos para entender la música, y no hizo ningún esfuerzo por encarrilarme a que aprendiera a tocar violín.

Lo que sí me enseñó fue a oír música clásica y ahora que hay tantas facilidades electrónicas, leo, escribo y duermo oyendo partituras que acaso nunca........

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