20 de octubre 2024 - 03:14
El rival más temible de Juanma Moreno no es el PSOE. No le preocupa Juan Espadas, entre otras razones, porque sus enemigos íntimos le hacen el trabajo sucio. Atrapados en sus legendarias batallas fratricidas, los socialistas siguen desconectados de la gente. La culpable de que el presidente se despierte algunas veces sudando en mitad de una pesadilla tampoco es Ayuso. El pulso entre las dos almas del PP todavía puede esperar. Lo que a Moreno le impide dormir a pierna suelta son los 600 días de espera para lograr la ayuda a la dependencia –demasiados usuarios no llegan a recibirla nunca–, las listas de espera del especialista, el colapso de la Primaria, la fuga de batas blancas y la poca fe en el sistema. Por esto le dio la vuelta a su Gobierno como a un calcetín empezando por la Consejería de Salud. Y a pesar de las horas extras de los profesionales y de la........