El dato es alarmante. Almería, junto con otras provincias como Granada, Murcia y Alicante, han experimentado un aumento en la extensión de zonas áridas de la última década. Según recoge un estudio de la Estación Experimental de Zonas Áridas (EZZA), dependiente del CSIC, la categoría “árida” (según la metodología FAO-UNEP) en España pasó de 307 kilómetros cuadrados a 7.100. Y una gran parte de este incremento ocurre en la provincia de Almería. Este fenómeno refleja un problema estructural que afecta de manera significativa a Andalucía, lo que aumenta el riesgo de desertificación y agravando la escasez de agua.
La superficie árida en nuestra tierra ha experimentado un cambio drástico........