América Latina: ¿Evitar una década perdida?

En plena celebración del 75 Aniversario de la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe), cobra relevancia el nombramiento de su Secretario Ejecutivo, José Manuel Salazar-Xirinachs, como titular de la Cátedra Ricardo Torres Gaitán 2024, en la Facultad de Economía de la UNAM (Universidad Nacional Autónoma de México), en un momento en el que México elige a su presidenta (primera mujer en su historia) y son muchos los ojos que se vuelven hacia América Latina, interesados en explorar potenciales escenarios de futuro, a partir de su incierta y compleja (como siempre) situación actual de partida. Siempre pletórica de oportunidades, disfrutando de un bono cualitativo y cuantitativo demográfico, cautivadora, llena de contrastes y riquezas diversas, vibrante, multicultural, en constante atracción-reparo de la inversión internacional. Hoy, con importantes signos alentadores para un potencial crecimiento, capacidades empresariales y talento de alto valor y polo atractor de proyectos, nuevos impulsos a su imprescindible diversificación económica, demandante de una transformación estratégica, alineable con los nuevos movimientos mundiales en torno al pensamiento económico, nuevas formas de desarrollo, descentralización-federalización optimizadora de igualdad y oportunidades de futuro y en opciones varias ante la nueva regionalización mundial e inversión extranjera.

Salazar-Xirinachs ha elegido para su mensaje de aceptación de la Cátedra, uno de los asuntos cruciales, siempre de actualidad, del que ya nos ha acostumbrado en sus publicaciones rigurosas e interesantes trabajos a lo largo de su prolífica labor en favor del desarrollo económico (especialmente productivo) y social, preguntándose por el cómo (además del qué) conseguir un ambicioso objetivo: “No más décadas perdidas para América Latina y el Caribe”.

El título de ambos documentos (Cátedra-Revista conmemorativa del 75 aniversario) es por sí mismo elocuente y viene seguido de una respuesta bajo “las grandes transformaciones en los modelos de desarrollo de América Latina”, que habrán de impactar su desarrollo socioeconómico y calidad de vida de sus poblaciones. Un largo e intenso proceso para el que no basta con señalar deseos, sino que resulta indispensable predefinir el cómo habrán de lograrse y los tiempos en los que son realizables, siempre condicionados, además, a la solución previa de asignaturas pendientes, de gran calado, desde el diálogo y coparticipación de los múltiples actores implicables en el proceso.

En su detallado documento investigador, aporta un extraordinario........

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