La secuencia cíclica del calendario (pura matemática discreta) hace que me toque columna el día de Reyes. No soy de reyes ni de magos (hablo de los que engañan y roban, en los dos casos) pero algo quedará en mí de ese relato tierno de sabios que vieron en el cielo señales notables, quizá porque mi trabajo me ha llevado a contar cosas celestiales. Así que me dejo llevar un poco aprovechando estos días en que la Tierra va un poco más rápida en su........