Dios aprieta pero no ahoga. El dicho popular es un bálsamo homeopático en situaciones límite, sin ninguna base científica a la que agarrarse para confiar en sus propiedades curativas, pero con un efecto placebo contrastado. La corriente más moderna de esa confianza en la mano prehomicida pero, al final, benevolente de Dios es el choking game,esa práctica exhibida en las........

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