LA HABANA, Cuba.- En la más reciente reunión del Consejo de Ministros, el mandatario Miguel Díaz-Canel Bermúdez esbozó la manera en que la jerarquía castrista espera que se comporte la economía nacional en el venidero año 2023.
El gobernante señaló como prioridades de su gobierno la producción de alimentos, estabilizar el funcionamiento del Sistema Electroenergético Nacional, incrementar las exportaciones, estimular la inversión extranjera, potenciar el turismo, disminuir el déficit presupuestario, mejorar la aplicación del sistema tributario —es decir, cobrarles más impuestos a los actores económicos no estatales —, y atenuar las desigualdades sociales. Estas últimas fomentadas, entre otras cosas, por la permanencia de las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), a las que no tiene acceso la mayoría de la población.
El ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, también presente en la cita, al referirse igualmente a las características que debe tener la economía en el 2023, apuntó que “la primera meta que nos hemos planteado para el Plan de la Economía de 2023 es acercarnos lo más posible a las condiciones que tenía la economía en 2019”.
El 2019, por supuesto, fue un lapso de mejor comportamiento de los indicadores económicos que el 2020 y el 2021, años estos signados por la pandemia del coronavirus. Sin embargo, si lo comparamos con los años precedentes, especialmente el 2017 y 2018, se observa en general una caída en los niveles de producción y servicios. Es decir, que ya en el 2019 se aprecia el agotamiento de un modelo económico fracasado. Veamos la información al respecto que nos brindan la firma Consulting Havana Group y el Anuario Estadístico de Cuba 2021.
Entre las actividades que más ingresos le aportan a la economía cubana, solo fue mejor en el 2019 la recepción de remesas. Ese año entraron al país 25 millones de dólares más que en el 2018. Pero el arribo de turistas extranjeros disminuyó en 436 mil 352 visitantes. De igual modo, disminuyeron en 2019 las misiones médicas cubanas en el exterior.
Las exportaciones de bienes y mercancías cubanas en el 2019 fueron las más bajas en 14 años (a partir de 2005), mientras que el monto de las importaciones —debido en lo fundamental a la endeblez de las finanzas externas del régimen— fueron las más bajas en diez años (a partir de 2009). Esto último, sin dudas, comenzó a marcar el desabastecimiento de productos de primera necesidad en los mercados. Un desabastecimiento que alcanzaría la cima en el 2020 y el 2021.
La zafra azucarera 2019-2020, con una producción de 1 183 000 toneladas de azúcar fue la segunda más baja del quinquenio comenzado con la molienda 2015-2016.
En el 2109 decrecen muchas producciones de la rama textil, así como la producción de cemento y acero, dos renglones de suma importancia para las construcciones y el plan de inversiones.
Y con respecto a las producciones que respaldan la alimentación de la población, el 2019 fue inferior al 2018 en la producción de viandas, hortalizas, cereales, tabaco, cítricos, leche, huevos, y la captura de pescado.
Tomando en cuenta lo anterior no es difícil imaginar que, de cumplirse el deseo de las autoridades, en el sentido de que la economía se acerque al desempeño alcanzado en el 2019, no habrá una verdadera recuperación, y por tanto no mejorará el nivel de vida del sufrido cubano de a pie.
ARTÍCULO DE OPINIÓN
Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no necesariamente representan la opinión de CubaNet.
Recibe la información de CubaNet en tu celular a través de WhatsApp. Envíanos un mensaje con la palabra “CUBA” al teléfono 525545038831, también puedes suscribirte a nuestro boletín electrónico dando click aquí.
La economía castrista aspira a una pírrica recuperación en el 2023
LA HABANA, Cuba.- En la más reciente reunión del Consejo de Ministros, el mandatario Miguel Díaz-Canel Bermúdez esbozó la manera en que la jerarquía castrista espera que se comporte la economía nacional en el venidero año 2023.
El gobernante señaló como prioridades de su gobierno la producción de alimentos, estabilizar el funcionamiento del Sistema Electroenergético Nacional, incrementar las exportaciones, estimular la inversión extranjera, potenciar el turismo, disminuir el déficit presupuestario, mejorar la aplicación del sistema tributario —es decir, cobrarles más impuestos a los actores económicos no estatales —, y atenuar las desigualdades sociales. Estas últimas fomentadas, entre otras cosas, por la permanencia de las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), a las que no tiene acceso la mayoría de la población.
El ministro de Economía y Planificación, Alejandro Gil, también presente en la cita, al referirse igualmente a las........
© Cubanet
visit website