Cuba era una República que daba cauce al pensamiento divergente

LA HABANA, Cuba. – Uno de los planteamientos que más ha trascendido de la más reciente entrevista concedida por el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel al periodista español Ignacio Ramonet es el relativo a que “aquí no se reprime la opinión de los que no están con la Revolución”.

Evidentemente, se trata de una declaración que no se ajusta a la realidad, pues hemos sido testigos de las muchas ocasiones en que periodistas independientes han sido víctimas de la política represiva de las autoridades. Mas, si hiciésemos una abstracción y le otorgáramos alguna dosis de verdad a las palabras del heredero de los Castro, llegaríamos a la conclusión de que no reprimir el pensamiento divergente, por sí solo, significa bien poco en el camino hacia la democracia.

El pensamiento divergente, además de no ser coartado, merece recibir la misma divulgación que el oficialista. Los periódicos y revistas que contienen el pensamiento divergente deben estar al alcance de la opinión pública sin ningún tipo de........

© Cubanet