Mi fórmula final |
Hace unos días me preguntaron en qué tipo de relaciones socioafectivas me había visto involucrada, y con toda certeza respondí que en casi todas sin excluir ni incluir nada a propósito: la vida me fue llevando de una a otra con naturalidad y en círculos inexplicables.
Hablo de noviazgos formales y amores platónicos, matrimonios legales y de consenso, un trío casual y varios triángulos (como vértice y como extremo, incomodísimos ambos roles), incluso sexo con desconocidos (no siempre a voluntad), amigos con derechos, pareja abierta, roommates, amantes virtuales…
¿Qué me falta entonces? Para empezar, una orgía, pero esa idea no me entusiasmó de joven y no creo que lo haga ahora, con más conocimiento que energía para desperdiciar.
Tampoco tuve (ni tendré, espero) relaciones de dominación / sumisión; ni he sido la mantenida de nadie; ni busco oficios afines a mis parafilias, como hace mucha gente por ahí… y no los critico porque ese es su derecho, mientras respeten la integridad física, espiritual y moral de la contraparte.
En el gran espectro de los vínculos eróticos, lo que sí me........