El mar Rojo sufre otro bloqueo. Dos años después de que un solo portacontenedores interrumpiera durante seis días el tráfico a través del canal de Suez, por el que circula el 12% de los flujos comerciales mundiales, los ataques indiscriminados de los militantes houthi de Yemen, alineados con Irán, están obligando a gigantes del transporte y las materias primas como Maersk y BP a tomar rutas mucho más largas a través de África. Este retraso podría durar mucho más, pero su impacto podría resultar menos grave.
La zona ha sido escenario de piratas ocasionales, pero los misiles y drones de los houthis no tienen precedentes. Según datos de Freightos, transportistas que representan en total casi el 60% de la capacidad normal han optado por desviar su ruta alrededor del cabo de Buena Esperanza, en Sudáfrica. Esto añade al menos entre 10 y 14 días de tiempo de viaje. En el peor de los casos, el transporte marítimo de juguetes, zapatos y ropa desde Asia tardará más de un mes en llegar al Mediterráneo oriental y Europa, mientras que antes solo tardaba 13 días.
El bloqueo del canal por parte del Ever Given en marzo de 2021 afectó drásticamente a los costes de transporte, lo que contribuyó a aumentar la inflación. Las tarifas en la ruta comercial entre Asia y el norte de Europa subieron hasta 20.000 dólares por contenedor, frente a la media histórica de 1.500, según Flexport. Los inversores que apuestan por una repetición han hecho subir un 25% las acciones de la naviera Hapag-Lloyd, valorada en 24.000 millones de dólares, desde que el día 15 suspendió todos los........