La bola de cristal del Oráculo de Omaha le ha fallado. Warren Buffett admite en su última carta anual a los accionistas de Berkshire Hathaway, publicada el fin de semana, que cometió un “costoso error” sobre la electricidad, al no anticipar o tener en cuenta la evolución adversa de la regulación de los servicios públicos. El error fue pensar que invertir enormes sumas para suministrarla a los hogares y empresas de EE UU generaría un retorno constante. En lugar de ello, se está convirtiendo en un gigantesco problema.
El conglomerado de 840.000 millones de dólares de Buffett desarrolló una de las mayores empresas de servicios públicos de EE UU, con más de 5 millones de clientes minoristas en varios estados, sobre la base de que sería tan fiable como la venta de crocante o seguros de automóvil. Hace solo unos años, Buffett pregonaba Berkshire Hathaway Energy (BHE), que explota redes de distribución de electricidad y gas, afirmando que sus beneficios se habían multiplicado casi por 30 en unas dos........