Que a un político le critiquen desde la oposición es habitual. Pero que sus partidarios quieran quitárselo de en medio es otro cantar. Nadie dio un céntimo por Joe Biden, tras su debate con Donald Trump en CNN, en la noche del jueves. Renombrados demócratas como David Axelrod (exasesor de Obama) y Thomas Friedman (columnista del New York Times) pidieron tras el debate que el Partido Demócrata abriera la puerta a buscar un sustituto a Biden para enfrentarse electoralmente a Trump en noviembre. Muchos congresistas y senadores demócratas escribieron lo mismo en las redes sociales.
¿Qué pasó en el debate para que muchos demócratas quieran –a pocos meses de celebrar su convención en Chicago– cambiar de candidato presidencial? “Intervención catastrófica” de Biden es la definición usada por los medios de izquierdas de EE UU para explicar su actuación en el debate. NYT, Bloomberg, Washington Post, CNN y MSNBC coincidieron en el diagnóstico: el enfermo está terminal y, como se decía de Felipe II al final de su reinado, si el rey no muere, el reino, muere. La agonía de un candidato presidencial fallido como Biden hace temer por la pérdida de las elecciones presidenciales y asientos en la Cámara de Representantes y el Senado.
No es que los demócratas odien de repente a Biden. Simplemente, temen que, siquiera por un puñado de votos, Trump gane las elecciones. CNN realizó una encuesta flash entre los televidentes del debate con intención de votar........