Este año se celebrarán elecciones en Rusia, al Parlamento Europeo y EE UU. Donald Trump ganará las primarias del Partido Republicano. Ha consolidado su ventaja en las encuestas sobre Biden a nivel nacional y en estados clave como Míchigan, Pensilvania, Wisconsin, Arizona y Georgia. Biden ha perdido apoyo entre los hispanos, jóvenes y afroamericanos. Trump le aventaja entre los blancos sin estudios universitarios. Una victoria de Biden mantendría una línea multilateral que es herencia de Barack Obama. Trump retomaría una política aislacionista y de negociar dura y bilateralmente con sus adversarios. Los que vaticinan el apocalipsis si gana Trump se equivocan. Igual que Vladimir Putin, no tiene ningún interés en una guerra. Los republicanos no aprueban más ayuda militar a Kiev y la contraofensiva ucraniana se ha convertido en un Verdún en el Donbás.
En EE UU preocupa la alta criminalidad, el coste de la vida, la entrada masiva de inmigrantes por la frontera, la educación y la cobertura médica. Las variables macroeconómicas son mejores que en Europa. El pleno empleo (tasa paro 3,7%), una estimación de crecimiento del PIB en 2023 del 2,4% y subidas salariales considerables conforman una economía dinámica. Sus índices bursátiles están en niveles históricamente altos. En 2023, el Dow Jones subió un 13,7%; el S&P, el 24%, y Nasdaq, un 43%, su mayor alza desde 2020.
Europa crece menos y está muy dividida. Las elecciones al Parlamento Europeo en junio decidirán la presidencia de la Comisión, Consejo, Parlamento Europeo y Alto Representante de la PESC. Asimismo, se medirán las fuerzas de los siete grupos políticos representados actualmente en el Parlamento Europeo: conservadores tradicionales (PPE), socialdemócratas y socialistas (S&D), Renovar Europa (liberales), Grupo de los Verdes, conservadores y reformistas europeos (derecha euroescéptica), Identidad y Democracia (ultraderecha........