Lo mejor del fútbol es que pasas del negro al blanco sin pisar el gris, me dijo un domingo de lluvia en Pasarón un entrenador del Pontevedra que vivía instalado en una montaña rusa. El Barça se trajo de Arabia un sobrepeso de dudas mientras su eterno rival pensaba ya en el triplete que nunca ha conquistado tras haberlo goleado con un punto de displicencia. Cuatro días después, el Madrid........© as