Eliminados de la Copa, el Madrid afronta en las próximas dos semanas cuatro partidos que pueden dejar la temporada bien colocada para rematarla con éxito. Los compromisos ante Getafe y Atlético, que alguien podría considerar menos importantes, parecen apropiados para medir la pierna fuerte del equipo, al que se ha visto sufrir para ganar a Las Palmas y Almería, que muerden mucho menos que los dos madrileños. Si ante los de Bordalás y Simeone se concede lo mismo, estos no perdonarán, así que al Madrid no le queda más que ir con todo y poner a los que tengan más frescura en las piernas. Ancelotti no puede volver a cometer el error que reconoció ante los almerienses.

Además, después viene una semana de descanso que tiene que ser aprovechada para recuperar bien y poner a punto a todos los que anden con el depósito algo vacío, como está haciendo ahora con Modric, para los dos choques siguientes que son los más decisivos: el Girona en el Bernabéu, que puede marcar una distancia definitiva para la Liga; y la ida de octavos de Champions en Leipzig, donde tiene que estar la llave de la eliminatoria.

OPINIÓN

JESÚS GALLEGO

Ancelotti tiene que tener a todos enchufados para este ciclo, dosificando y rotando, pero compitiendo desde mañana en el Coliseum. Si te dedicas a pensar sólo en Girona y Leipzig te pueden pintar la cara y dejarte lleno de dudas.