Los Estados Unidos poseen, seguramente, unas 800 bases militares repartidas por todo el mundo. No hay otro Estado que haya desplegado sus redes de agresión de esta manera. Es evidente que no son, en su mayoría, bases para le defensa de su territorio, sino redes para la "defensa de sus intereses".
Por contraste, hasta 2017, la República Popular China no poseía ninguna base militar en el extranjero. En esta fecha, inauguró la de Yibuti. El deterioro de la diplomacia, que es la marca distintiva de la política de halcón yanqui, obligará a los chinos a aumentar su despliegue exterior, pero aún así, hasta llegar a las 800 bases de los yanquis, calificar al país asiático como "amenaza" parece una pesada broma.
Los rusos quizá posean más de una docena de bases, aunque la gran mayoría se sitúan en países vecinos de la órbita rusa, fronterizos con la propia Federación Rusa en su extensión actual, antiguas repúblicas integradas en la extinta URSS. En este caso, cabe hablar de bases "defensivas" en el sentido pleno de la palabra. Es cierto que con el reciente ascenso de poder de la Federación Rusa, brillantemente liderado por Putin, se ha dado un discreto movimiento de proyección exterior. La proyección africana de los rusos está siendo muy importante, y concertada con la acción tecnológica, financiera, de China, se prevé un desalojo de "Occidente" en el continente negro. El imperio basura de los franceses, franquicia del norteamericano, está disolviéndose. Los pueblos africanos al sur del Sahara ya tienen más sitios dónde mirar para pedir créditos al desarrollo y establecer estrategias de cooperación. Los antiguos colonizadores galos huyen al modo de los roedores ante las revueltas militares del Sur. Otra proyección rusa es Oriente medio: ya no se entiende un nuevo orden regional sin la voz varonil de Siria e Irán, en armonía con Rusia y unidos frente al cuervo de la tempestad que es USA. Por su parte, el Caribe y algún país iberoamericano son espacios amigables y con posibilidades de futuro para los militares rusos si los pueblos de allí se levantan contra las maquinaciones de la CIA, como ocurrió ya en Cuba y Venezuela.
Ochocientas bases yanquis frente a unas docenas, como mucho, de las otras dos potencias con capacidad de hacerle frente al imperio de las barras y las estrellas; las "amenazas" rusa y china, junto con todos........