Elecciones en guerra avisada

Es un momento casi absurdo para llamar a elecciones, pero parece lo único que puede hacerse ante la violencia que se nos viene encima. Vietnam rima con napalm, y nos queda demasiado lejos. Resuenan los ecos de la humillación de Las Malvinas. Libia es el modelo de la destrucción: ni un solo muerto de parte de la OTAN. El acoso militar en nuestras costas es el mayor peligro de la historia republicana para la supervivencia nacional. La mayor afrenta jamás sufrida. La planta insolente agrandando su talla. Trump propone tierra arrasada para apropiarse de minerales raros y fuentes de energía. Sueña resorts y campos de golf bajo torres petroleras con banderitas norteamericanas. Quiere competir con los de Gaza que hará su socio vil Netanyahu, indetenible en su vesania. 

Son protagonistas de tragedia. El mundo agobiado por la soberbia autoritaria y neoimperialista del presidente de la primera potencia militar del mundo. Hegseth sueña vestirse de procónsul y el espíritu de Epstein pide venganza a su heredero Rubio, que enloquece de gusano resentimiento. Lo que suceda aquí definirá el futuro inmediato de un mundo trabucado de dinámicas picarescas. El Corolario Trump le pone música a las palabras “nobeladas” de María Corina. Ansias de patio trasero que se abre a cañones potentes. La traición tiene su marca y se hace franquicia: Milei, Kast, Bukele, Novoa... Triste también las palabras vacías de patrioterismo........

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