Soportaos unos a otros

La vida cristiana va mucho más allá de una práctica religiosa; Jesucristo vino a enseñarnos a vivir de acuerdo a los principios del Reino de los cielos. Tal como también nos mostró la manera de pedirlo en oración: “Venga a nosotros tu reino y hágase tu voluntad en la Tierra, así como la haces en el Cielo”. Cada una de las instrucciones sobre las actitudes y comportamientos que nos debemos los unos a los otros representan un principio de ese reino que se traduce en una vida de armonía, amor y paz. En este quinto episodio de la serie Unos a otros, nos corresponde profundizar en el mandato del versículo de Efesios 4:2 acerca de soportarnos con paciencia los unos a los otros.

El verbo soportar proviene del latín supportare formado por el prefijo sub que significa debajo o desde abajo y el verbo portare que denota llevar y cargar; por consiguiente, el significado de soportar significa sostener un peso, cargarlo desde abajo y llevarlo. En el sentido clásico soportar es sostener una estructura pesada para evitar que se derrumbe. A lo largo de la historia este concepto referente al mundo físico o material comenzó a usarse de forma metafórica para expresar una situación emocional o en el sentido más amplio psicológica y/o espiritual, como sostener una situación difícil, dar soporte al estado de ánimo de una persona en circunstancias adversas y, aún más, tolerar, llevar con longanimidad sus diferentes estados anímicos. 

En este último sentido, no se trata de aguantar con fastidio, ni mucho menos de aceptar violaciones a la dignidad humana por el maltrato de otros. Por el contrario, se trata de hablar la verdad con humildad y mansedumbre, guiando al otro a rendir su carácter al Señor. El verbo griego anechómai significa permanecer al lado del otro para ayudarlo a seguir adelante cuando su........

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