Las reformas pendientes del BEI

El Banco Europeo de Inversiones (BEI) es el gran banco público europeo. Se trata un gigante financiero con un potencial muy superior al que está desarrollando actualmente. Bajo el mandato de Nadia Calviño, su nueva presidenta, la entidad deberá experimentar una profunda transformación para satisfacer las nuevas necesidades europeas. La Unión ha encomendado al BEI que concentre sus actividades futuras en la financiación de aquellos proyectos encaminados la transición energética para luchar contra el cambio climático y, más recientemente, proporcionar recursos para la reconstrucción de Ucrania. Paralelamente, la entidad deberá corregir las graves deficiencias descubiertas en su funcionamiento, en las condiciones de trabajo y los malos comportamientos denunciados por el Parlamento Europeo, el Tribunal General de la UE y la Defensora del Pueblo.

El banco público, propiedad de los 27 Estados miembros de la Unión Europea, es la entidad multilateral mayor del mundo, con unos activos de 544.588 millones de euros, superior a los 312.000 millones de euros del Banco Mundial. La institución ha sido clave para España, el país europeo que ha recibido el mayor volumen de financiación barata: 75.382 millones de euros, el 13,42 % del total, muy superior a peso de su economía y su población en la Unión. El banco emplea a unos 2.900 profesionales, la mayoría ingenieros, economistas y juristas.

El BEI es una de las instituciones más antiguas de la Unión. Fundado en 1958, un año después del Tratado de Roma, que constituyó la Comunidad Económica Europea, el BEI proporciona financiación a largo plazo para los grandes proyectos europeos como las redes de transporte y........

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