El cisne negro permanente

Los cisnes negros de Taleb son lo normal, en 2024 un cisne negro será un día sin masacre, que no pase nada o que haya un poco de paz. El concepto “cisne negro” ha sido desbordado por su frecuencia. Es tan veloz la barbarie, hay tanta desesperación y tanta urgencia que parece que las fábricas de misiles hacen rogativas para que estallen nuevos conflictos, terrorismos, invasiones. Más rezan las armas que los que quieren la paz. Quizá la industria de las armas, tan respetada como los bancos, ha puesto sus algoritmos a reventar el mundo.

La invasión de Israel a Gaza en respuesta a la incursión de Hamás sobre Israel tiene su onda expansiva en forma, de momento, de colapso logístico, algo que ocurre también con frecuencia por diversas causas, incluyendo la sequía que impide el uso normal del canal, un barco cruzado… Los canales y los estrechos, como las emociones, son embudos frágiles que pueden estallar en cualquier momento. Al menos en Egipto se renueva el dictador y no hay revoluciones de momento. El Sahel, la faja de África, como escribe Francisco Gan, es un hervidero de conflictos y terrorismos para el que los primeros mundos ni siquiera tienen tiempo ni recursos. La epulsión de Francia,........

© 20 minutos