Sí, ya sé que los muñecos son de Maricarmen y que lo que tiene María Jesús es un acordeón, pero en este caso el intercambio viene perfecto. (Por cierto, un abrazo a María Jesús Grados Ventura, que tuvo un accidente de coche hace poco). Lo que se vio ayer en el senado fue peor que uno de aquellos programas del sábado noche presentados por José Luis Moreno.
La vicepresidenta, acostumbrada ya a la contradicción, los cambios de opinión y a defender lo que le digan, hizo un ejercicio de política cutre y de demagogia para no decir nada y no dejar a nadie........© 20 minutos