¿De verdad somos analógicos?
"Así que es usted analógico", me dijo el empleado cuando rehusé su oferta de un soporte digital de eBook. "No, mire, yo soy normal. Soy una persona física, real y tridimensional", le respondí con amabilidad, pero con la firme intención de dejar claras las cosas.
La aclaración me pareció necesaria porque no somos los humanos los analógicos sino los televisores que usábamos antes de que llegara la llamada era digital. Confundir las teles con los humanos me parece un paso inquietante. Ya sé que se usa esa trasnominación de forma coloquial, pero me resisto a ella. Me resisto simplemente a ese desplazamiento semántico de un ente tecnológico a mi persona. Uno ni es analógico ni es digital. Sencillamente no se halla dentro de una pantalla. No pertenece al mundo de las representaciones audiovisuales. No es que tenga ningún prejuicio........
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