Bajo el concepto tradicional, la economía es un sistema de producción, distribución, comercio y consumo de bienes y servicios de una sociedad o de un país. En base a esta noción, la acumulación capitalista evita que existan procesos de solidaridad en el sistema económico que pueda ser justo y redistributivo. Este tipo de economía crea desigualdades en general y entre mujeres y hombres en particular, lo que significa una inequitativa distribución del trabajo tanto productivo como de cuidado y trabajo doméstico.
Por esta razón, las economistas feministas proponen el concepto de economía del cuidado haciendo una clara diferencia con la economía en general, concentrada en explicar el funcionamiento de los mercados y la economía del cuidado más centrada en la reproducción de la vida.
Desde esa economía y según el marxismo, el trabajo doméstico y de cuidados es la base de la explotación capitalista, pues es un trabajo no pagado y no reconocido, gracias a ello el capitalismo paga menos al trabajador y este así mismo no valora el aporte de su mujer.
La economía del cuidado, desde las feministas, plantea que la división sexual del trabajo es la base de la desigualdad, crea la doble jornada para las mujeres cuando entran al mercado de trabajo y no reciben ningún tipo de remuneración, se caracteriza por poner en el centro del análisis la sostenibilidad de la vida. En consecuencia, el objetivo del funcionamiento económico desde esta mirada no es la reproducción del capital, sino la reproducción de la vida.
Entonces, la economía feminista se concentra en reconocer, identificar, analizar y proponer cómo modificar la desigualdad de género como elemento necesario para lograr la equidad socioeconómica. Por ello, es un programa académico, pero también político porque plantea la transformación en un sentido más igualitario.
En el funcionamiento del sistema económico, se reflexiona sobre la injusticia de la actual forma de organización social del cuidado y los desafíos que impone a las políticas públicas, en el marco de sociedades que aspiran a mayor igualdad.
En nuestra realidad, entra en la agenda pública la necesidad de tener políticas públicas de cuidado para superar la división sexual del trabajo y despatriarcalizar las políticas públicas.
Se han desarrollado leyes, especialmente a nivel municipal; primero la Ley 090 de Economía del cuidado y luego la Ley N°380 de Corresponsabilidad con el trabajo no remunerado para la igualdad de oportunidades. Esta última en actual vigencia con bastantes limitaciones económicas. Estas leyes, en resumen, plantean lo siguiente: Creación de servicios de cuidado para niños y niñas, para adultos mayores, para personas con discapacidad y personas enfermas, también propone la corresponsabilidad con los cuidados en la familia y en especial del esposo, con el Estado, la sociedad y la comunidad. El tiempo libre que tendrán las mujeres servirá para estudiar, mejorar su ingreso al mercado de trabajo, o participar en política. La ley también propone mejorar las condiciones de las cuidadoras, contar con un presupuesto sensible al género e incluir en el proceso de planificación del PTDI y POAs municipales.
A nivel nacional, las mujeres han creado la Plataforma Nacional de Cuidados que ha elaborado la propuesta de un sistema nacional de cuidados y desde el Viceministerio de Igualdad de Oportunidades se desarrolla una política de cuidados próxima a ser aprobada.
SENTIDO COMÚN
MARÍA ISABEL CAERO
Arquitecta
[email protected]
Economía mercantil y economía del cuidado
12
18
31.12.2023
Bajo el concepto tradicional, la economía es un sistema de producción, distribución, comercio y consumo de bienes y servicios de una sociedad o de un país. En base a esta noción, la acumulación capitalista evita que existan procesos de solidaridad en el sistema económico que pueda ser justo y redistributivo. Este tipo de economía crea desigualdades en general y entre mujeres y hombres en particular, lo que significa una inequitativa distribución del trabajo tanto productivo como de cuidado y trabajo doméstico.
Por esta razón, las economistas feministas proponen el concepto de economía del cuidado haciendo una clara diferencia con la economía en general, concentrada en explicar el funcionamiento de los mercados y la economía del cuidado más centrada en la reproducción de la vida.
Desde esa economía y según el marxismo, el trabajo doméstico y de cuidados es la base de la........
© Opinión
visit website
login
who are we?
contact us
qosheapp
Toi Staff
Gideon Levy
Belen Fernandez
Andrew Mitrovica
Mort Laitner
Nikkei Editorial
Rami G Khouri
Ali Fathollah-Nejad
