El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, el mejor homenaje que se les puede hacer desde el Gobierno Municipal, es reconocer sus contribuciones a la ciudad, pues no solo dan y cuidan la vida, sino que, pese a las dificultades de discriminación, desvalorización e injusticia, sus aportes son innumerables. En esta oportunidad, es necesario conocer los diferentes problemas que tiene la vida de las mujeres en la ciudad para poder enmendarlos.
Es una realidad afirmar que en las políticas municipales no consideran a las mujeres como ciudadanas plenas en los procesos de planificación y gestión del territorio, por lo tanto, no se realizan acciones para conseguir mayor equidad e igualdad para ellas.
Las mujeres viven con miedo en la ciudad por la violencia e inseguridad a que están sometidas en los diferentes espacios urbanos, en la calle, en las plazas, en las movilidades del transporte público, por el acoso y las violaciones y en las propias viviendas por la violencia doméstica y los feminicidios.
Los sistemas de movilidad urbana existentes en las ciudades no son respuestas eficientes a sus necesidades de transporte y múltiples traslados, pues sus movimientos tienen diferentes rutas y no son de una sola ruta.
El acceso a los servicios básicos se ve limitado por problemas de titularidad de la vivienda; en cuanto a los equipamientos, su dificultad se basa en la poca consideración de sus demandas y necesidades.
Asimismo, los técnicos y el gobierno no internalizan la necesidad de resolver los problemas de cuidado y de trabajo doméstico que por la división sexual de trabajo recae solo en ellas, lo que les genera una doble y hasta triple jornada.
Otro problema fundamental es que las mujeres no reciben apoyo municipal para mejorar sus ingresos y su situación económica, lo mismo que para su acceso al suelo y la vivienda, especialmente en la situación de madres, jefas de hogar, quienes viven junto a sus hijos en condiciones muy precarias.
De la misma forma, el uso de los espacios públicos y de recreación está restringido, porque no piensan en ellas al momento de diseñarlos y construirlos, tampoco participan en la elaboración de planes para enfrentar el cambio climático y la prevención de riesgos, y su importancia radica en que pueden aportar para mejorar la calidad de vida y el aire para respirar.
En cuanto al abastecimiento, los problemas cotidianos se expresan en que existe una oferta reducida, mal distribuida y sin servicios adecuados.
Pero uno de los aspectos más importantes que se debe considerar en la planificación es que se distribuya el presupuesto municipal de manera equitativa y mediante acciones afirmativas para solucionar los problemas más álgidos que tienen las mujeres; las propuestas y proyectos para mujeres deben contar con los presupuestos necesarios.
¿Será posible que se analicen en el GAMC estos problemas y que para solucionarlos haya un compromiso político?
En general, se verifica que hay un sistema patriarcal en el Municipio de Cochabamba y este régimen se constituye en el principal obstáculo para conseguir políticas justas y equitativas.
Entonces consideramos que esos deben ser los compromisos del GAMC y de otros gobiernos municipales para mejorar la situación y condición de las mujeres y no solo para acordarse el 8 de marzo o el 11 de octubre y regalarles flores.
SENTIDO COMÚN
MARÍA ISABEL CAERO
Arquitecta
[email protected]
Compromisos municipales para mujeres
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11.03.2024
El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, el mejor homenaje que se les puede hacer desde el Gobierno Municipal, es reconocer sus contribuciones a la ciudad, pues no solo dan y cuidan la vida, sino que, pese a las dificultades de discriminación, desvalorización e injusticia, sus aportes son innumerables. En esta oportunidad, es necesario conocer los diferentes problemas que tiene la vida de las mujeres en la ciudad para poder enmendarlos.
Es una realidad afirmar que en las políticas municipales no consideran a las mujeres como ciudadanas plenas en los procesos de planificación y gestión del territorio, por lo tanto, no se realizan acciones para conseguir mayor equidad e igualdad para ellas.
Las mujeres viven con miedo en la ciudad por la violencia e inseguridad a que están sometidas en los diferentes espacios urbanos, en la calle, en las plazas, en las........
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