Allá por el año 2011, una denuncia llegó al Concejo Municipal sobre una casa hermosa que se estaba demoliendo y comprobamos que evidentemente ya se habían sacado las puertas y ventanas. Entonces desde el Concejo realizamos las acciones para declararla Patrimonio y así se evitó su destrucción.

Nos enteramos que había un interesado conocido en construir edificios de departamentos y que inclusive ya existían algunos en preventa. Realizamos todas las operaciones para que esta propiedad se conserve y para ello mucha gente se sumó a un movimiento de defensa de la Casa Bickenbach. Los posibles dueños ya habían fallecido, era muy difícil buscar a los herederos que vivían en Cúcuta, Colombia. Apareció un poder y con ese poder se hizo el intento de compra para construir edificios, pues el terreno tenía como 5.400 m2, cantidad muy apetecida por su ubicación en la calle Wallparrimachi, cerca de la plaza de Cala Cala.

Se realizaron muchas labores, no del todo claras, para apoderarse de ese terreno con un poder que al parecer solo era para regularizar y pagar impuestos.

En el Gobierno Municipal, el año 2014 se aprobó una ley de expropiación la N°. 0069/ 2014, para que pase a poder del municipio y, por ende, a la comunidad cochabambina y así tener un centro cultural, algo así como el mARTadero de la zona sur.

El área legal del GAMC realizó las investigaciones con los herederos de Colombia y se concluyó que en ningún momento el poder era para realizar la venta del inmueble. Sin embargo, con el cambio de Gobierno se dejó de lado la investigación y con un simple documento de adelanto de compra se logró llevar al remate, y el GAMC de la gestión 2015-2020, no hizo nada para evitarlo.

Posteriormente, se realizó una remodelación sin cumplir las normas legales de restauración que era lo que correspondía y nuevamente se empezó la propaganda mediática para construir edificios alrededor de la Casa Bickenbach, con el nombre de Campus Cala Cala, Multicentro Cultural y de Formación Superior. Posteriormente, cambiaron nuevamente de nombre y crearon el Centro Fearlees S.A., una empresa con fines culturales y de educación superior para la ciudad. Se pretendía construir el rectorado, penetrando la casa, un edificio principal de 10 pisos, otro edificio de 6 pisos Centro de la Amistad, y otro la Torre de las Ciencias y las Artes. De la misma manera, se empezaron a vender acciones. Sin embargo, entre medio, la Dirección de Patrimonio del GAMC desarrolló un decreto edil No. 265/2021, donde, en resumidas cuentas, dice que según normas internacionales la declaratoria de Casa Quinta incluye la casa y sus jardines, por lo tanto, no se puede construir nada en los jardines.

Por esta razón y al ver que no podía construir nada que le signifique ganancia, el señor que adquirió este predio, ahora la puso en venta, indicando que es un terreno de 5.700 m2, donde se pueden construir muchos edificios e incluso pueden demoler la casa, tal como se ve en la propaganda de un periódico local.

Es hora de que las autoridades, tanto municipales, departamentales y nacionales, realicen todas las acciones para evitar esta venta, pues existen los instrumentos legales que la respaldan, Ordenanza Municipal, Ley Municipal de Expropiación, Ley Departamental de Patrimonio y Ley Nacional también de Patrimonio. No puede ser que primen los intereses capitalistas de un individuo, frente a la posibilidad de tener un espacio bello para uso y beneficio de toda la población.

SENTIDO COMÚN

MARÍA ISABEL CAERO

Arquitecta y exconcejal

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QOSHE - Casa Bickenbach, otra vez en peligro - María Isabel Caero
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Casa Bickenbach, otra vez en peligro

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14.01.2024

Allá por el año 2011, una denuncia llegó al Concejo Municipal sobre una casa hermosa que se estaba demoliendo y comprobamos que evidentemente ya se habían sacado las puertas y ventanas. Entonces desde el Concejo realizamos las acciones para declararla Patrimonio y así se evitó su destrucción.

Nos enteramos que había un interesado conocido en construir edificios de departamentos y que inclusive ya existían algunos en preventa. Realizamos todas las operaciones para que esta propiedad se conserve y para ello mucha gente se sumó a un movimiento de defensa de la Casa Bickenbach. Los posibles dueños ya habían fallecido, era muy difícil buscar a los herederos que vivían en Cúcuta, Colombia. Apareció un poder y con ese poder se hizo el intento de compra para construir edificios, pues el terreno tenía como 5.400 m2, cantidad muy apetecida por su ubicación en la calle Wallparrimachi, cerca de........

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