Después de un primer trimestre verdaderamente excepcional, las bolsas hicieron esta semana un alto en su camino alcista, optando el grueso de los inversores por realizar parte de las jugosísimas plusvalías acumuladas en uno de los mejores arranques de ejercicio de los últimos años.

Aquí el Ibex retrocedió un 1´43%, perdiendo temporalmente el recién conquistado nivel de los 11.000 enteros.

El papel no tuvo “miramientos” y la mayoría de los ahorradores optaron por las ventas, siendo pocos los valores que lograron esquivar las mismas. Fuertes descensos para compañías como Colonial, Fluidra y Cellnex que cedieron respectivamente un 5´19%, 5´29% y 9´15%. Dinero para el sector financiero que siguió mostrando su mejor cara, con mención especial para CaixaBank y Sabadell que subieron un 4´01% y un 5´26%. Importante revalorización la que registraron los títulos de Repsol (+4´76%) y sobre todo los de la farmacéutica Grifols que, pese a verse forzada a reformular sus cuentas anuales, se anotó en las cinco últimas sesiones unas plusvalías del 8´30%.

Caídas importantes en la mayoría de plazas foráneas, oscilando los recortes entre los dos puntos porcentuales que se dejaron las europeas y el más del 3% que lo hicieron el Dow Jones de Nueva York y el Nikkei de Tokio.

Pocos movimientos en los mercados de deuda y divisas. En los cambiarios, el fixing euro dólar se fijó en las 1´08 unidades, mientras en los primeros, el bono a diez años se fue al 3´23%, 8 “pipos” por encima del ofertado siete días antes. El Tesoro se vio forzado a elevar la rentabilidad que paga a los demandantes a más largo plazo, logrando mantener en niveles similares las emisiones al más corto.

De la inestabilidad de la renta variable y divisas se benefició el oro, que volvió a ejercer de valor refugio, marcando récords históricos, cotizando por encima de los 2.300 dólares/onza.

Por su parte, las tensiones geopolíticas auparon al barril de Brent, que se fue a zona de máximos anuales, rompiendo al alza la barrera de los 90 dólares.

Frenazo en seco del bitcoin, que bajó en la semana más de un 2%, lo que no empaña el magnífico año que lleva la principal moneda virtual que se ha apreciado desde abril de 2023 más de un 100%.

El presidente de la Fed, Jerome Powell, manifestó en una conferencia en Stanford que aún era pronto para poder determinar si la inflación estaba o no bajo control. Un día después, la presidenta del BCE -Christine Lagarde- reconoció que “su dureza” ha dañado la economía más de lo esperado. Ni políticas laxas, ni políticas férreas. Hay que aplicar siempre políticas que, controlando el endeudamiento, favorezcan el crecimiento. Así de fácil, así de complicado.