El mayor atractivo natural que tiene Cartagena es el agua. Al frente está el esplendoroso Mar Caribe que ha sido su guía hacia el mundo, y en el interior la inmensa y segura bahía, la Ciénaga de la Virgen y los caños, que desde tiempos inmemoriales la convirtieron en un territorio archipiélago.

Por lo menos así era antes de comenzar el atolondrado ataque humano contra los espejos de agua que logró reducir orillas y cauces hasta convertir ese gran patrimonio ambiental en uno de los graves problemas que enfrenta la ciudad.

En la ciénaga de la Virgen por allá en los años 50 se pescaban sábalos de gran tamaño y otras especies que nutrían la mesa de muchos cartageneros y servían de sustento económico a un buen número de pescadores que las comercializan a diario. Con el crecimiento de la ciudad llegó la necesidad del alcantarillado y la brillante idea que surgió para dar paso a ese adelanto fue convertir la ciénaga en la gran cloaca de la ciudad en expansión.

No fue el único atentado contra la ciénaga, porque a lo largo de años fue rellenada por familias pobres para construir sus cambuches sobre el agua por no tener donde vivir. Esas construcciones endebles abrieron el camino a la gran zona suroriental en la que habita gran parte de la población cartagenera.

Otro ataque se dio por el norte donde arroceros desviaron los cauces de los arroyos para garantizar el agua dulce a sus cultivos, negándosela a la ciénaga que la necesitaba para conservarse como ecosistema, ideal para fomentar la biodiversidad de peces, anfibios, manglares, reptiles, aves.

También por el norte se dio y continúa el apoderamiento de este cuerpo de agua para construir casas y edificios de diversos tipos.

La Bahía interna tampoco se ha salvado del relleno y ha perdido buena parte de sus orillas de agua que ahora son suelo duro donde prosperan muelles, edificaciones y factorías industriales.

Los caños no han tenido mejor suerte y ahora agonizan ante la arremetida del escombro y las construcciones de todo tipo sobre sus cauces, sin que autoridad alguna lo haya impedido.

En definitiva, Cartagena no supo aprovechar la riqueza del agua para ponerla a su favor, y por el contrario desperdició un activo invaluable que pudo darle mucho más brillo a su portentosa historia. Pero conserva aún mucha riqueza hídrica y está a tiempo de salvar la Ciénaga de la Virgen y recuperar buena parte de los caños. La bahía tendrá nueva vida con la recuperación del Canal del Dique.

QOSHE - Cartagena ciudad agua - Eduardo García Martínez
menu_open
Columnists Actual . Favourites . Archive
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close
Aa Aa Aa
- A +

Cartagena ciudad agua

8 0
13.01.2024

El mayor atractivo natural que tiene Cartagena es el agua. Al frente está el esplendoroso Mar Caribe que ha sido su guía hacia el mundo, y en el interior la inmensa y segura bahía, la Ciénaga de la Virgen y los caños, que desde tiempos inmemoriales la convirtieron en un territorio archipiélago.

Por lo menos así era antes de comenzar el atolondrado ataque humano contra los espejos de agua que logró reducir orillas y cauces hasta convertir ese gran patrimonio ambiental en uno de los graves problemas que enfrenta la ciudad.

En la ciénaga de la Virgen por allá en los años 50 se pescaban sábalos de gran........

© El Universal


Get it on Google Play