No nos cansaremos de conceptuar que para lograr la transformación socio-integral de Cartagena, uno de los elementos esenciales es ejecutar un plan de cultura ciudadana que tenga como objetivo formular, concertar, coordinar y realizar acciones para promover el respeto a la vida, los derechos de los vecinos, las reglas sociales, normas legales, costumbres y tradiciones en el distrito de Cartagena, con el fin de mejorar los niveles de comportamiento de los habitantes a través de procesos pedagógicos colectivos.
La simple observación cotidiana nos muestra y los estudios de programas como Cartagena cómo Vamos reafirman los bajos niveles de cumplimiento a las reglas de convivencia, ambiente y movilidad, evidenciando que en nuestra ciudad aceptamos conductas irregulares como normales, situación que nos aleja de la civilidad y por el contrario nos acerca al primitivismo; estadio de la humanidad donde no existían reglas sociales predominando los instintos naturales. El constante irrespeto a las señales de tránsito como los semáforos y las cebras, que pone en riesgo la vida del peatón, las quejas de los vecinos por el abuso con el ruido de los equipos de sonidos y la contaminación de los cuerpos de aguas con basuras, entre otras infracciones, son justificaciones para que en un plazo mínimo de diez años se desarrollen en esta urbe acciones continuas con la participación de los medios de comunicación, el sector educativo, los gremios, organizaciones sociales y el liderazgo del gobierno distrital.
A nuestro paso por la Dirección de la Escuela de Gobierno y Liderazgo (2013-2015), en la administración del alcalde Dionisio Vélez, asumimos la tarea de realizar acciones de formación ciudadana a través de cursos, seminarios, jornadas lúdicas en las comunidades, empresas e instituciones educativas de secundaria, técnica y superior, la edición de videos y la cartilla “Comportamientos para reaprender y transformar la vida en comunidad”, también presentamos al Concejo de Cartagena “El proyecto de acuerdo para la formulación, elaboración y ejecución del Plan Decenal para la Promoción de la Cultura Ciudadana del Distrito de Cartagena”, que ordenaba la unificación de acciones y recursos que hoy están divididos en distintas entidades distritales, lo que disminuye el impacto que deberían causar. Lástima que no hubo tiempo para su aprobación, iniciativa que urge retomarse, ya que generara grandes avances en la construcción de una mejor ciudadanía. El éxito de otras ciudades se ha alcanzado en procesos continuos, siendo prioridad el interés colectivo.
*P.U. Comunicación Social Periodismo.
Especialista en Formación de Formadores.
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