Al Viveros Herol Nava le ha cambiado la suerte. Y este hecho innegable vino a ponerse de manifiesto en el encuentro que en la mañana del domingo el conjunto segoviano perdió ante el Balonmano Logroño después de haber hecho méritos para haber sumado por lo menos un punto ante un oponente que tampoco merecía irse de vacío del Guerrer@s Naver@s, pero que terminó llevándose el premio gordo gracias a su mayor experiencia a la hora de jugar encuentros con el marcador apretado. Gastar dos minutos en un ataque en inferioridad para acabar marcando en el último pase antes de que fuera señalado el pasivo no está al alcance de muchos equipos, y el del navero Miguel Ángel Velasco lo hizo a la perfección.
Las defensas se impusieron a los ataques en el arranque del partido. Al Balonmano Logroño le costó ver portería, de tal manera que su primer gol no llegó hasta el minuto 6, pero es que en el otro lado al Balonmano Nava le pasaba prácticamente lo mismo. Tanto Luis de Vega en el lado local como Palasiscs en el visitante encontraron la ayuda de los defensores, por lo que el partido se vaticinaba de marcador corto.
Tomas Smetanka, en una de las acciones clásicas del central eslovaco, llegando a los seis metros./ AMADOR MARUGÁN
Y así fue, pero el encuentro también se movió entre parciales favorables para uno y otro. Fue el Viveros Herol quien llevó la iniciativa en el electrónico hasta que, mediado el primer tiempo, un bache ofensivo segoviano, unido a la mejoría ofensiva logroñesa con Javi García abriendo muchos espacios desde el pivote, propició un parcial visitante de 0-3 que obligó a Álvaro Senovilla a parar el partido para volver a activar a sus hombres, porque de nuevo habían llegado los errores absurdos, los lanzamientos no estaban siendo precisamente los mejores, y en defensa la presencia de pivotes tan enormes como Javi García o Rolando Uríos condicionaba tanto la salida a los lanzadores riojanos que en no pocas ocasiones estos se encontraban con mucha ventaja para poder armar el brazo.
DEL 9-12 AL 15-12
El tiempo muerto local fue todo un bálsamo, porque el 6:0 defensivo recobró energías, los ajustes propiciaron que el Balonmano Logroño ya no fuera tan preciso a la hora de conectar con los seis metros, y en ataque la presencia de Smetanka le dio más velocidad al juego. De esta manera el equipo de casa devolvió el parcial multiplicado por dos, pasando del 9-12 a un 15-12 con ‘Pancho' Ahumada muy acertado tanto en el extremo como desde los siete metros. El gol de Juan Palomino bajó la renta local a dos goles con el sonido de la bocina.
Tras el paso por los vestuarios, de nuevo la igualdad fue la nota dominante, con los porteros cobrando mucho protagonismo y sin grandes diferencias en el electrónico ya que tanto locales como visitantes se repartieron aciertos y errores. Si Nava equivocaba un pase, Logroño fallaba un lanzamiento razonablemente sencillo desde el borde del área. Pero a su vez, si los de casa acertaban con una buena acción ofensiva consiguiendo que Carró se hiciera con la bola y superara a Palasics, prácticamente sin solución de continuidad Thiago Alves sacaba a relucir toda su potencia de fuego para superar un triple bloqueo y marcar un gran gol.
Pancho Ahumada, entrando por el extremo./ AMADOR MARUGÁN
Por ello no había manera de discernir cuál de los dos conjuntos iba a llevarse el gato al agua. El dos para dos de los visitantes con Javi García por el centro hacía mucho daño, pero tanto como las trayectorias largas de los laterales del Viveros Herol. Y entre medias, Patotski y Palasics sumaban un buen puñado de paradas de mucho mérito que daban vida a sus respectivos equipos y desesperaba al contrario, obligado a hacer otra buena defensa para evitar que el contrario se marchase en el marcador. Así se llegó al 20-19 en el minuto 45, al 22-22 en el 50, al 25-25 en el 55…
Y en estas el partido se metió en una recta final en la que de nuevo hubo opciones para los dos. La tarjeta roja para Gonzalo Carró por golpear a un atacante riojano puso a los visitantes con ventaja al aprovechar un lanzamiento desde los siete metros, pero Prokop tomó la responsabilidad de empatar el encuentro con un lanzamiento desde doce metros que sorprendió a la defensa del Balonmano Logroño.
MEJOR LOS VISITANTES AL FINAL
En el ataque siguiente los árbitros señalaron un ‘pisando' a Javi García que terminó con el pivote franjivino castigado con dos minutos de exclusión cuando al partido le restaban pocos segundos más de ese tiempo para finalizar. Era el momento del Balonmano Nava, y seguramente hace un mes el equipo segoviano habría sacado el partido adelante.
Pero en esta ocasión no fue así. El ataque local acabó en las manos de Dani Pérez que se encontró con la enésima parada de Palasics, y Logroño dispuso de un ataque para volver a ponerse por delante. Patotski paró la primera, pero su despeje volvió a un jugador del Balonmano Logroño, que fue gastando los segundos hasta que, a 21 para el final, Miguel Ángel Velasco pidió tiempo muerto y ordenó una última jugada de ataque. Amenazó el lanzamiento lejano con el altísimo Modi, pero engañó a todos cuando el lateral, en lugar de lanzar, le dio el pase a Rolando Uríos que hizo el 26-27.
Carró logra lanzar a portería. AMADOR MARUGÁN
Nava quiso devolver la jugada con Senovilla pidiendo tiempo a diez segundos para la conclusión, pero el ataque fue mucho más deslavazado y terminó siendo bien frenado por el conjunto visitante que se acabó llevando los dos puntos porque la experiencia es un grado, y porque el Viveros Herol se ha metido en una dinámica mala. Afortunadamente no hay motivos para la alarma clasificatoria, y el trabajo que viene realizando el equipo le acabará sacando de la situación.
(26-27) A Nava le cambia la suerte
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21.04.2024
Al Viveros Herol Nava le ha cambiado la suerte. Y este hecho innegable vino a ponerse de manifiesto en el encuentro que en la mañana del domingo el conjunto segoviano perdió ante el Balonmano Logroño después de haber hecho méritos para haber sumado por lo menos un punto ante un oponente que tampoco merecía irse de vacío del Guerrer@s Naver@s, pero que terminó llevándose el premio gordo gracias a su mayor experiencia a la hora de jugar encuentros con el marcador apretado. Gastar dos minutos en un ataque en inferioridad para acabar marcando en el último pase antes de que fuera señalado el pasivo no está al alcance de muchos equipos, y el del navero Miguel Ángel Velasco lo hizo a la perfección.
Las defensas se impusieron a los ataques en el arranque del partido. Al Balonmano Logroño le costó ver portería, de tal manera que su primer gol no llegó hasta el minuto 6, pero es que en el otro lado al Balonmano Nava le pasaba prácticamente lo mismo. Tanto Luis de Vega en el lado local como Palasiscs en el visitante encontraron la ayuda de los defensores, por lo que el partido se vaticinaba de marcador corto.
Tomas Smetanka, en una de las acciones clásicas del central eslovaco, llegando a los seis metros./ AMADOR MARUGÁN Y así fue, pero el encuentro también se movió entre parciales favorables para uno y otro. Fue el Viveros Herol quien llevó la iniciativa en el electrónico hasta que, mediado el primer tiempo,........
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