El 1º de enero de 1958 dos pelotones de la Unidad Escuela de Paracaidistas de Maracay, comandados por Enio Ramón Ortiz Cordero, tomaron la base aérea de Boca de Río, lo cual marcó el derrocamiento de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez 22 días más tarde. En los siguientes 34 años se dio una serie de alzamientos contra el puntofijismo iniciado por Rómulo Betancourt, quien suspendió las garantías en varias oportunidades y comenzó la matanza que dejó unos 200.000 muertos (más de 3.000 desaparecidos) por la represión policial.

Todas las sublevaciones fracasaron, pero la del 4 de febrero de 1992, quedó marcada con la frase “¡Por ahora!”, pronunciada por el comandante eterno Hugo Chávez, seguida con el alzamiento del 27 de noviembre que unió a la Armada con las FAV y sectores civiles. También fracasó este intento, pero fue de carácter revolucionario, como el de 9 meses antes. A nuestro marco histórico pasarán los nombres del segundo alzamiento de 1992 (31 años ayer): Hernán Grüber Odremán, Luis Enrique Cabrera Aguirre, Luis Reyes Reyes, Francisco Visconti Osorio; y militantes de Bandera Roja y Tercer Camino.

Cerca del final del siglo XX, el 6 de noviembre de 1998, quien emitió la frase abarrotó las urnas de votos que lo llevaron a la Presidencia de la entonces República de Venezuela, y que él llevó a la República Bolivariana de Venezuela, rescatando la memoria del Libertador donde actualmente tenemos a Nicolás Maduro en el mando presidencial en acción para rescatar el Esequibo, el cual nos fue robado en París el tres de octubre de 1899, cuando Inglaterra y USA se confabularon en el llamado Laudo Arbitral de París.

Ambos alzamientos tenían el mismo fin, rescatar la memoria del Libertador, de ahí que muchos de los involucrados en ambos alzamientos estuvieron en el juramento del Samán de Güere en 1982, destacando al propio Chávez. Era esa oficialidad de las FAN no infestada por el imperialismo que entonces operaba en los cuarteles nacionales. Estos elementos históricos deben relucir cuando la gran mayoría de los venezolanos está en plena movilización de rescate del Esequibo, territorio de casi 160.000 km, que repito, nos fue robado por Inglaterra y USA. También debemos tener claro que no es el pueblo guyanés el que está involucrado en la decisión de no cumplir los convenios acordados, sino el mandatario Irfaan Ali, quien está al servicio de la Exxon Mobil y otras empresas yanquis, británicas y holandesas. Por eso a votar cinco veces sí el 3-D, dentro de cinco días.